Y ahora, con mis ideas en desorden, me lanzo a disfrutar de un refrescante baño en el mar de la Intranquilidad. Corren tiempos extravagantes, fastuosos y a la vez tímidos. Pero habré de hacer acopio de las pocas fuerzas que aún me restan para enfrentarme a ellos como es de rigor. Si bien es cierto que hay veces que las piernas me tiemblan y parezco a punto de desmoronarme...
1 comentario:
tiempos fastuosos? si qieres nos emborraxamos en algun bar, como en las peliculas, qizá no sirva de nada,pero sería bohemio, no? jaja
aurevoir mon cadour :)
tu xarms.
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