1,2,3,4,5,6,7,8,9 y 10

No quiero contar más. Me sobran cosas que contar con tan pocos números. Puede parecer pretencioso, pero al reflexionar sobre el tema se constata que lo realmente importante puede contarse con las manos: amigos verdaderos, pensamientos cuasi perfectos, enamoramientos, buenas obras...
Lo superfluo e inútil, en cambio, exige de cientos, miles de números para ser abarcado: dinero, malas ideas, estúpidos...

3 comentarios:

AMA dijo...

Muy desgraciadamente, la velocidad con la que el mundo se mueve es directamente proporcional a la cantidad de ceros que posee el número que lo empuja.

Qué suerte tienen algunos niños de saber contar nada más hasta diez, nosotros podemos querer nada más contar hasta diez, pero iriamos más lentos en el mundo y acabaríamos siendo atropellados por una estampida numérica ávida de mundo, gritos hacia mudos, canibalismo y veolcidad.

¿Te acuerdas de la teoría que tenía, y tengo, de la palma de la mano?

AMA

Anónimo dijo...

vaya pabluno, cuanta razón tienes :) y si mme apuras ,con 5,me basta :D

dile a Maiquez qyo no me acuerdo de su teoría de la palma de la mano ,y q me la cuente.

He visto (porfin)tu vida en 65'.
ahora me voy a tumbarme en el suelo y pensar en todas las cagadas.
xarms.

AMA dijo...

con lo de contar hasta cinco la teoría, mi teoría, has dicho.

(me acaba de venir a la cabeza aquella coña de TU-toría, MI-toría,
NUESTRA-toría)